Pasillo largo (desde aquí) te propones caminar. Oscuro de humedad que chorrea. Sólo una luz al final te invita.
Despeinado, siempre cerca del azul Francia sin boina y lejos del rojo moda antigua, no te detengas en detalles.
Aquella luz brilla, resplandece.
Pasillo poblado te prometes cruzar. Laguna negra con ojos desconocidos que se clavan no te producen temor.
Escuchás el diario y los alaridos de una armónica para tapar los pensamientos en voz susurrada de pared a pared de tu mente.
Y aquella luz aún brilla, aún resplandece.
Pasillo sofocante te aseveras sobrepasar. Algo extraño pasa allí, ya ni querés mirar.
Tu deseo se resume en una lluvia renovadora y el dulce de leche dorado que adorna el blanco a lunares.
Y aquella luz todavía brilla, todavía resplandece.
Pasillo eterno te gusta atravesar. Recuerdo análogo de Hudson, de Tolosa corre por las paralelas de la avenida que Chimichurri hace vía. Te parece lo mismo y te gusta.
Le hiciste caso: Que allá te irá bien, gritaba Beto.
Todos habrán volado, incluso aquella luz que Recién Brilla, Recién resplandece en el fondo del pasillo.
2 comentarios:
Me hundo en tus ojos de lago....
Guardame un lugar en tu corazon, yo no se esperar FANTASIAS en mi alma...
Publicar un comentario